En este espacio se colgaran todos los documentos y materiales del congreso y se podrán descargar desde el día siguiente a la finalización de mismo durante seis meses.
Una vía para la construcción de proyectos personalizados con personas con discapacidad intelectual
En este taller se analizan los diferentes tipos de alojamiento existentes como alternativas al hogar familiar en el caso concreto de las personas con discapacidad intelectual. Estos alojamientos responden a necesidades diversas y presentan modelos de gestión también diversos y condicionados por el modelo de intervención que está detrás. Tras fijar el marco conceptual pasaremos a analizar aspectos prácticos de la gestión de este tipo de alojamientos: el liderazgo, el personal (trabajadores o voluntarios), la organización, los recursos, la sostenibilidad…
El concepto de calidad de vida se ha convertido en un área de especial interés para las aplicaciones prácticas y la investigación en los campos de la educación y educación especial, la salud física y mental, los servicios sociales (discapacidades intelectuales y del desarrollo, mayores), las familias, las organizaciones y las políticas públicas. El cambio significativo de paradigma que está ocurriendo en la comprensión de la discapacidad es paralelo al cambio de paradigma hacia la Psicología Positiva que ha habido en las Ciencias del Comportamiento. El concepto, modelo y teoría de calidad de vida son parte integral de este cambio de paradigma, junto con el desarrollo de un modelo ecológico de la discapacidad y la provisión de apoyos individualizados.
El valor que tiene el concepto de calidad de vida es que integra los cambios de paradigma citados, sirviendo como marco de referencia para redefinir las prácticas de los profesionales y la gestión del rol de las organizaciones que proporcionan servicios y
apoyos a las personas con discapacidades intelectuales y del desarrollo. Hablar de calidad de vida significa hablar de resultados personales y su medición, la cual planteamos relacionada con ocho dimensiones de calidad de vida y sus indicadores, que han sido ampliamente estudiados por los autores.
La ciudadanía, es un derecho que puede y debe ser disfrutado desde la infancia temprana a través del establecimiento de condiciones que faciliten y promuevan su participación.
La participación, constituye a la vez, el elemento fundamental para desarrollar las capacidades que son esenciales para una vida ciudadana con una presencia auto-determinada. La participación es también el mecanismo que permite al niño con limitaciones en su funcionamiento cognitivo y socio-adaptativo tener una identidad positiva.
El desarrollo se va constituyendo en el tiempo en un contexto ambiental en el que los niños con limitaciones en su funcionamiento cognitivo y socio-adaptativo utilizan sus recursos de desarrollo, así como mecanismos organizativos para adaptarse cada vez más y mejor a las demandas del ambiente. También, en dicho ambiente se pueden generar los apoyos necesarios para evitar las restricciones en su participación individual, familiar y comunitaria.
En los primeros años, las posibilidades de adaptación del niño y la aplicación de apoyos para generar oportunidades de interacción con los otros y organizar experiencias que conlleven algún nivel de implicación, tienen un enorme efecto preventivo en la configuración de la discapacidad. Por ello en la infancia temprana es más propio hablar de proceso discapacitante.
Las relaciones de colaboración entre los profesionales de la IT y las familia de los niños con limitaciones cognitivas y socio adaptativas son trascendentales ante la pobreza cultural y espiritual en que la que vivimos. Pobreza generada en gran medida por el abuso del poder de los medios, el consumo irracional de productos del mercado, las imágenes de personas exitosas, entre otras. Por lo que la solidaridad y el sentido comunitario deben ser recuperados si se aspira a mejores escenarios de vida para los niños pequeños en riesgo de discapacidad.
En la actualidad y en los próximos años habrá cambios importantes en los modelos de prestación de servicios a las personas con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo. Frente al desarrollo de servicios especiales, segregados de la sociedad y por tanto desiguales, se crearán progresivamente modelos de pertenencia comunitaria que utilicen un paradigma de apoyos centrado en la persona. Mas allá de pensar en la rehabilitación de los déficit, se planificarán los apoyos para el futuro de la persona, involucrando a la propia persona y al medio familiar y de personas próximas de manera activa. Para ello, hay que utilizar estrategias cualitativas centradas en la persona e instrumentos objetivos que evalúen directamente las necesidades de apoyo.
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